Brasil cuenta con 14 regiones productoras de café, repartidas por todo su territorio en siete estados distintos, cada una con su sabor, su aroma y sus estándares de calidad. Minas Gerais es el estado cafetero más grande del país, albergando casi el 50% de la producción total de café. En su interior, no podemos dejar de hacer referencia a la región de Cerrado de Minas o Cerrado Mineiro, que da nombre a la primera denominación de origen surgida en Brasil. Este café pertenece a esta región y es el resultado de la mezcla de cafés de tres fincas distintas, ubicadas en los municipios de Coromandel (Finca Pantano I), Perdizes (Finca Vitoria) y Patrocinio (Congonhas), entre los 950 y los 1050 metros de altitud. Cabe destacar que, en las tres fincas, los productores trabajan bajo los criterios de sostenibilidad y respeto al medio ambiente. Asimismo, esta región posee unas condiciones edafológicas excepcionales para la producción cafetera, así como un clima templado, con veranos húmedos e inviernos templados y secos. Estas características son las que dan como resultado este café poco convencional, que destaca en buena parte de sus atributos y que, además, posee un aroma y un sabor capaces de despertar sensaciones incomparables.